EL HUERTO A primeros de JULIO

Ya ha entrado el verano. Las plantas han arraigado y están creciendo, algunas ya muestran el incipiente fruto. 

Finalmente, el huerto ha quedado constituído por las siguientes plantas:
cebollas, cebolletas, pimientos de 3 clases, tomates, pepinos, calabacines, lechugas de 3 clases, apio, berenjenas, brócoli, ajos puerros, berzas, zanahorias, acelgas, melones y sandías.

Hemos tomado nuevas muestras mediante fotos. Os las remito para que veais el avance de las plantitas.

Aparte del huerto, hemos dedicado tiempo a  vallar la finca para que los perrillos puedan campar a sus anchas sin necesidad de estar controlados. Ellos lo disfrutarán y nosotros estaremos más relajados, sin miedo a que salgan corriendo a la finca del vecino. Esta semana quedará listo.
Y, lo que ya está listo es el rincón para hacer el compost a base de paja con los restos de segar la hierba que según los libros de horticultura va muy bien para prevenir plagas y hacer el colchón que ayuda a conservar la humedad de la tierra y a la vez evita que salgan malas hierbas.

Poco a poco vamos acumulando datos para nuestro huerto, las fechas idóneas para plantar, con que lunas hay que hacerlo, los cuidados que hay que darle a la planta y otros detalles interesantes. La madre de Carlos nos va guiando en algunos temas pero en otros, preferimos ser nosotros los que busquemos los datos y los aplicamos a nuestra manera. Ya veremos el resultado. De todas formas, esta es nuestra experiéncia y la estamos viviendo.

Parece mentira que estemos en verano, por aquí hace fresco, en la cama tenemos manta y mejor tener a mano una chaqueta para las mañanas y las tardes.
Espero que a últimos de mes podamos ya comer algo más que lechugas.

Mientras vemos crecer el huerto dedicamos algo de tiempo a ponernos al día a través de internet y a leer. Yo, concretamente estoy leyendo "EL TIEMPO ENTRE COSTURAS" de María Dueñas, un libro
ameno, entretenido y que engancha, recomendable para  lectura de ocio.

Próximamente os cuento más del avance.

Y ahora, hortelana

Si, a partir de este año me convierto en hortelana.
Carlos y yo hemos organizado un huerto un poco variado y del que hoy ya hemos comido la primera lechuga.

Han pasado años desde la apertura de este blog y desde entonces poco he insertado en él. Ahora lo retomo de nuevo para compartir mi experiencia  hortelana en un pueblo de Galicia con mi pareja y mi suegra de 90 años que a pesar de la edad se niega a quedarse sentada y nos asesora y participa cavando en la siembra del huerto.

Desde Abril en que hicimos las primeras siembras de varias clases de pimientos y otras plantas de tomates, a día de hoy en que hemos puesto apio, cebollas,  pepinos, lechugas, berenjenas, calabacines  y berzas, y alguna cosa más que ahora mismo no recuerdo, hemos dedicado tiempo a su cuidado, riego y en los primeros meses hemos hecho un invernadero casero para  resguardarlas del frío. Ahora vamos viendo su crecimiento y toca quitarles las malas hierbas, ponerles estacas para que trepen y quitarles aquellas ramas que impedirán su crecimiento. Ya se ven las flores que posteriormente serán frutos y habrá que ir pensando en la elaboración de suculentos platos para degustar esos productos totalmente naturales, sin ningún tipo de insecticidas (si llegan a buen fín sin bichos, claro).

Nos hace mucha ilusión haber emprendido este proyecto para abastecimiento de la casa con productos naturales.Ya os iremos contando como nos va.

Adjunto alguna fotografía para que os hagáis una idea de como va el huerto.

Taquillón

Este taquillón de herencia, fue mi primera restauración.

No tenía nada claro ni donde lo iba a poner ni lo que tenia que hacer con él pero me puse a buscar información y a leer sobre como restaurar muebles viejos y conseguí darle un aspecto totalmente diferente al que presentaba.

Primeramente, un buen lavado para una evaluación objetiva y comprobar que no tuviera carcoma. Retirada de la pintura vieja, bastante oscura y tristona con decapante, fue el primer paso.

Una mano de tapaporos para preparar la madera, después, una mano de pintura blanco roto y a continuación unos toques de betún de Judea para conseguir un aspecto envejecido.

Para finalizar, una mano de barníz brillante para darle un poco más de vida y el aspecto final que se consiguió es este.

Zapatero

El mueble que os presento es un taquillón con puertas giratorias para colocar los zapatos. Es un mueble de herencia.

Pintado en color madera originariamente, los herrajes estaban oxidados y tenía carcoma en su parte baja.

Se procedió a desmontar los herrajes, lavar la madera y retirar la pintura con decapante. A continuación se lijó y se le dieron 3 manos de matacarcoma con un intérvalo de 15 días entre la primera mano y la segunda y de 7 días entre la segunda y la tercera mano, sellando los agujeros de la carcoma con masilla y lijando todo el mueble a continuación.

Para iniciar el proceso de pintado, se le dio una mano de tapaporos y dos manos de pintura acrílica mate de color blanco roto. Se lijaron los cantos para dar una apariencia de decapado envejecido y finalmente se dio una capa de barniz satinado. Los herrajes se lijaron para quitarles el óxido, se les dio una mano de antioxidante y se pintaron de color negro. Posteriormente, se procedió al montaje de las puertas y los herrajes, siendo este el resultado.

Armario restaurado

Este armario se rescató de ser destruido cuando se procedió a la renovación de mobiliario en la oficina de una empresa.

Se encontraba en muy mal estado, con los estantes rotos, las puertas, que son de persianilla estaban atascadas y no bajaban además, con el paso del tiempo le habian ido acumulando capas de pintura.

Se empezó la restauración con una buena limpieza frotando un estropajo con agua y jabón.

A continuación para retirar la pintura se aplicó un decapante. Una vez seco se repararon los desperfectos con masilla para igualar la madera y una vez seco, se lijó.

Para pintarlo, primero se le aplicó una mano de selladora (tapaporos) y dos capas de barniz satinado, lijando el mueble entre una capa y otra.

Una vez reparado y pintado el mueble se le colocaron ruedas grandes y se forró el interior y los estantes con papel pintado.

Una lectura reciente

"Un hombre de palabra" de Imma Monsó.

Relata la despedida emocional de una mujer al fallecer su pareja. Un marido con el que ha convivido 20 años y del que tiene una hija. El único hombre de su vida que no la hizo sentir tedio nunca. Esperando al tedio, le llegó la enfermedad que juntos llegaron a superar para luego morirse de un ataque cardíaco y dejarla sola.

Ahora ella, hace un repaso de su vida en común, narra lo que ese hombre significó en su vida y no sabe como encauzar su nueva vida.

Lectura íntima que nos hace reflexionar sobre la muerte de la pareja.